Mi casa

Para cualquier persona que me escuche durante 2 minutos, sabrá que si hay algo en donde tengo puesta la cabeza desde hace mucho tiempo, y más ahora que se acerca, es mi casa (reme, tambien en ti, pero eso será motivo de otro post).

LLevo desde pequeño, no con la ilusión de la independencia, ni de vivir en un sitio determinado, ni tener nada en concreto.. mi deseo era la casa como elemento, como edificio, un diseño, algo lo más propio que consiguiera. LLené mis libretas de colegio de diseños imposibles, o de simples casas cuadradas con extrañas piscinas o vidrieras enormes.

Un día, hará unos 2 años y mucho, decidí que esto se hiciera más concreto. No elegí a la persona, sino que fue algo casual, estabamos hablando de otros temas, y pensé que mi prima, que de interiorismo sabe un rato, podría ayudarme a empezar al revés, la casa hacia afuera, decirle que ideas tenía, que espacios quería tener, que estilo de casa, por si ella me podía dar alguna idea.

Y dos meses después, quede en casa de su abuela, y me expuso un proyecto, que si bien no se parece en mucho al resultado final, me hizo ver que tenía la ilusión, conocimientos e ideas diferentes que yo buscaba para concretar mis ideas de niño.

Fueron muchos meses de cambios de proyecto, de ideas que me gustaban, pero no del todo y se cambiaban con excesiva ligereza. Pero sobre todo, y es una cosa que le agradezco a Go, es quitarme tonterías, ideas faraónicas, hacer práctica la casa, evitar sobregastos innecesarios... en resumen, que la idea era una casa, no un museo.

En este tiempo, cada novedad que iba teniendo la comentaba con todos los que me rodean. Alguno seguro que está muy harto de mi casa. Otros me ayudaron, con una servilleta de papel, a hacer combinaciones nuevas, que aunque no se hayan concretado, disfrute en su momento. Y en ese tiempo llegó Reme, la persona por la que hoy día quiero que la casa tome forma lo antes posible, y poder disfrutar juntos de estos años de imaginaciones.

Me hubiese gustado haber estado con ella desde la gestación, para que fuese un proyecto tan mío como suyo, pero creo que entiende que llegó a mi vida con esto a medias, y como por suerte le gustaba la idea, seguimos adelante. Espero que el visto bueno que le dió al proyecto fuera sincero, y no sólo para contentarme.

Pues la cosa ya está a punto, pendiente del visado del colegio y ayuntamiento, y ponermos manos a la obra. Todos los días me imagino viviendo allí, invitando a gente, celebrando fiestas, pero sobre todo estando a diario en la compañía que deseo.

Estais todos invitados, tanto a la obra, como después!!